Un concepto de recuperación singular
ERDE es un concepto de recuperación para plásticos agrícolas. Su necesidad se debe al uso excesivo de laminas estrechables de silo, laminas de ensilaje a nivel, films de base y demás productos de plástico en el sector agrícola. Pues especialmente en un sector tan unido y dependiente de la naturaleza, estos productos no deberían contaminar el medio ambiente tras su uso y deberían incorporarse a la economía circular.
Con el objetivo de aumentar la sostenibilidad del sector agrícola y reducir el empleo de recursos, los miembros de la Asociación de la Industria Alemana de Envases de Plástico (IK, Industrievereinigung Kunststoffverpackungen e.V.) y RIGK desarrollaron en común el sistema de recuperación ERDE.
Los fabricantes participantes pueden encontrarse aquí
Qué tipo de envases se aceptan?
En los puntos de recogida del SISTEMA ERDE, puede entregar las laminas de ensilaje a nivel, laminas de base, tubos de ensilaje, laminas estrechables de silo, laminas sustitutos de mallas, lámina de espárragos, lámina de espárragos, lámina perforada, redes de fardos redondos, velones forma económica y película de mantillo.
Para la devolución de las láminas de maduración acelerada, los fieltros e las redes que hasta ahora se realizaba a través de los sistemas FOLIO y NETTI, diríjase al equipo de RIGK.
¿Cómo funciona la devolución?
Los plásticos agrícolas que se pueden entregar al SISTEMA ERDE se dividen en cinco grupos (ver más arriba) y por consiguiente se deberán recolectar y entregar por separado. Antes de la devolución, los plásticos se deberán barrer y eliminar así la mayoría de la suciedad, además no deberán contener materiales extraños ajenos (por ejemplo hierro, madera o neumáticos). Personal cualificado comprueba in situ si se cumplen todos los requisitos de entrega.
Recuperación sostenible
El SISTEMA ERDE es una solución independiente y simple para el reciclaje sostenible y ecológico de plásticos agrarios. Una vez recuperados, los plásticos se trituran en nuestras plantas de reciclaje, se limpian y siguen el paso del reciclaje de materia prima, en el que se genera el regranulado que sirve de base para la fabricación de nuevos productos de plástico. Gracias a la colaboración de los fabricantes y agricultores, se completa el ciclo del reciclaje, se ahorran materias primas y se protege el medio ambiente.